Despertar con un disparo tan vital y romperse mi universo azul, sin hablar.
Y tus ojos marcando el camino; alcanzar y pensar en detalles que engrandecen y dar más.
Casi a ciegas comencé a avanzar, me calmé entre tus olas, en tu mar, para navegar.
Y volar junto a tus pisadas y saber, que el fuego puede quemar y cuidar a las sirenas que duermen junto a este animal, que ruge, vive, crece y pide más.